Datos obtenidos y facilitados por Juan Sánchez Lozano Altigrafía elaborada por Josemi Ochoa |
Localización: Unos ciento cuarenta km al este de México DF, en el estado de Tlaxcala, encontramos la población de San José Teacalco. Situamos el inicio en la zona este de la localidad, en el cruce de las avenidas Reforma y Miguel Hidalgo |
Especificaciones: Carretera de unos cinco metros de anchura con señalización horizontal y asfalto en buenas condiciones hasta el centro vacacional del IMSS. A partir de ahí hay algún tramo con grandes baches y gravilla. Sombra continua a partir del quinto km y escaso tráfico. |
Fuentes: No existen, aunque hay varios establecimientos en el inicio donde podremos proveernos de líquido. Finalizando el quinto km encontramos una barbacoa, que sólo abre los sábados y domingos, donde también podremos surtirnos. Y el último punto lo encontramos al final del octavo km en el albergue del IMSS. |
Descripción: Se trata de una ascensión, sin salida por otra vertiente, hasta la base de una estación de microondas situada en el paraje conocido como “albergue viejo” a media ladera del extinto volcán de La Malinche, situado en el Parque Natural del mismo nombre. Esta montaña, la quinta más alta de México con sus más de 4.400 metros de altitud, era conocida con el nombre de Matlacuéitl por los antiguos tlaxcaltecas. El nombre actual se lo asignaron los españoles en honor a una joven indígena que les ayudó como intérprete.
Esta joven, compañera inseparable de Hernán Cortés, con quien llegó a tener un hijo, posee una subyugante y controvertida historia. Traidora para unos y verdadera madre de México para otros, su vida no deja indiferente a nadie que tenga un cierto interés por la Historia. Lo cierto es que por su mediación se evitaron muchos derramamientos de sangre. Su nombre original parece que era Malinalli pasando luego a Malintzin, nombre con el que también se conoce esta montaña. Los españoles la llamaban también doña Marina y Malinche es una degeneración del original.
Antes de describir la ascensión, comentar, por si alguno no se ha dado cuenta, que la parte más dura de este puerto está por encima de los 3.100 metros. Así que no nos llamemos a engaño por el coeficiente, de por sí importante, ya que el esfuerzo que vamos a tener que realizar será extremo.
La ascensión presenta tres partes bien diferenciadas. La primera, a través de campos de labor, cuyo cultivo principal es el maíz, llega hasta el final del quinto km, con una pendiente bastante regular donde no llegamos al 10% en ningún punto. El km más duro es precisamente el quinto, que da paso a la siguiente fase del ascenso. Comienza ésta a la entrada del magnífico bosque de pinos que nos acompañará hasta el final, con un tramo llano en el que pasamos junto a una estación de microondas (torre de comunicaciones), unos metros antes de llegar a la barrera de entrada (llamada pluma en estos lugares) del Parque Natural de La Malinche. Allí debemos dejar nuestros datos a un guarda, antes de proseguir la ruta. Unos metros después, la pendiente aumenta de nuevo, pero aún nos desenvolvemos en cifras asequibles (aunque a estas altitudes casi nada es asequible) de alrededor del 7% de media. Dos km después de la pluma, llegamos a un cruce donde dejamos a la izquierda la carretera que conduce a Huamantla. Nosotros seguimos de frente, trazando unas amplias herraduras, hasta llegar a la entrada del Centro vacacional del Albergue del IMSS. Entramos aquí en la última fase del ascenso, cuatro km inmersos en el pinar, que presentan una dureza considerable. Y para pasar a este tramo habrá que desmontar de la bicicleta y cruzar por la cuneta del camino una valla que impide el paso de vehículos motorizados (con excepción de los oficiales). Hasta el final, habrá que estar preparados para enfrentar tramos cortos con baches grandes y grava suelta. Los dos primeros km de esta fase son algo menos duros, pero con rampas importantes y los dos que quedan hasta finalizar el km 12, casi no nos van a presentar ningún punto en el que bajemos del 10%. Y esto, a la altitud que estamos, es durísimo. El medio km final, por suerte es bastante más suave. Podemos consolarnos un poco si vemos algún montañero que se dirige hacia la cumbre, ya que al pobre aún le quedan mil metros de desnivel por superar. De regreso, no se olviden de tener precaución con los excursionistas, que aunque tienen un camino en linea más o menos recto a la cumbre, de vez en cuando cruzan por el nuestro y en general no voltean a ver a los lados antes de hacerlo.
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Mapa situación:
La mayoría de los mapas están obtenidos del MAPA DE CARRETERAS editado por el Ministerio de Fomento o de Google Maps
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