Localización: A la salida de Lemoa, dirección Igorre, junto a la última casa a la izquierda, tomamos un desvío (señalizado) para cruzar al otro lado del río. Seguimos 250 metros en dirección aguas arriba, donde junto a una casa se inicia una fuerte pendiente, que marca el comienzo de la ascensión. |
Especificaciones: Carretera estrecha sin señalización horizontal y con el asfalto rugoso aunque en buen estado, hasta la última casa de Gandariats. A partir de allí, pista de hormigón de tres metros de anchura, con firme liso y perfecto, casi como si estuviese asfaltado. Abundantes sombras y tráfico casi inexistente. |
Fuentes: Solo hemos visto una en el barrio de Gandariats en un abrevadero adosado a un caserío. Aunque sea particular, seguro que nadie nos negará hacer uso de ella si nos vemos necesitados. |
Descripción: Una pena que no podamos llegar con bici de carretera hasta el collado de Belatxikieta (660 m.), un precioso enclave que dispone de área recreativa, fuente, ermita e incluso una típica taberna en el caserío allí ubicado. Este lugar es la puerta de entrada al impresionante macizo kárstico de Aramotz y nos ofrece unas magníficas vistas en todas direcciones. El camino que asciende por el lado este, desde Euba, pasa a ser pista de tierra y grava (aunque tiene algún tramo de hormigón) a partir del barrio de Bernagoitia. Y al que aquí presentamos, que parte de Lemoa, le ocurre exactamente lo mismo aunque llegamos mucho más cerca del citado collado. Se trata de una durísima, aunque corta, ascensión y solo hay que ver su porcentaje medio para percatarse de ello. Únicamente encontramos un mínimo tramo, el que atraviesa el barrio de Gandariats, en el que la pendiente baja por poco del 10%. En el resto, los únicos “descansos”, por decir algo, que vamos a tener, estarán en el 12%. Comienza en Lemoa, cerca del río y de un antiguo molino y ya desde el inicio entramos con un 12% de pendiente. Al de 200 metros, tomamos el cruce a la izquierda, señalizado hacia Gandariats, para continuar con fuerte pendiente a través de un pinar, hasta llegar al barrio. Hasta aquí solo ha sido un aperitivo, aunque en algún punto habremos superado el 15%. Tras la última casa del barrio, comienza el hormigón y entramos en el Parque Natural de Urkiola junto a un panel descriptivo del mismo. Nace aquí una recta de 300 metros que se nos hará eterna, ya que la pendiente aumenta paulatinamente desde el 13% inicial hasta cifras que rondan el 20%, para mantenerse por encima del 15% hasta una curva a izquierdas donde podremos respirar un poco, eso sí, al 12%. Atravesamos un paso canadiense y la pendiente aumenta algo hasta entrar en el tramo más duro, también prácticamente recto, en el que tendremos que superar un 21% de pendiente máxima. Un tramo más suave, nos lleva hasta otra dura rampa, aunque algo menos que la anterior, para llegar tras un zigzag a la altura de un amplio cortafuegos originado por la construcción de un gasoducto que discurre bajo él. Desde ese punto, rodeados por el pinar, solo tendremos una vista, eso sí preciosa, hacia el macizo de Itxina y los aledaños del Gorbea. Hasta no hace mucho aquí finalizaba el hormigón, pero ahora tenemos un kilómetro más con dicho firme. La primera mitad, aunque tiene una media del 12%, nos servirá para recuperar un poco y afrontar la última rampa que de nuevo nos deja en cifras cercanas al 20% en una curva a izquierdas. Tras ella, una recta y la pendiente que disminuye paulatinamente hasta el final del hormigón. Apenas 200 m más adelante vemos un bar-refugio al que se puede llegar sin problemas por pista de grava y tierra. Buen lugar para tomar algo si es que está abierto. Desde la cima disfrutaremos de buenas vistas alcanzando a ver Bilbao, el Serantes sobre Santurce e incluso los montes cántabros de la zona de Guriezo.
NOTA: las fotos de la galería están tomadas antes del hormigonado del último kilómetro. |
Mapa situación: |
© |
|