SANTA ÁGUEDA-EL TOSTADERO - Altimetrías de Puertos de Montaña

Localización: Dejamos la BI-636 al paso por el barrio de Castrejana, cruzando al otro lado del río Cadagua al barrio Las Delicias por el conocido como Puente de las Brujas o del Diablo. Al final del mismo hay un cruce a la izquierda, señalizado hacia Santa Águeda.
Especificaciones: Carretera muy estrecha, sin señalización horizontal, pero asfaltada en buenas condiciones hasta el km 1,5. Después, firme hormigonado con acabado liso hasta el final. Sombras continuas en los primeros 800 m; luego desaparecen casi por completo. Tráfico casi inexistente.
Fuentes: Una en el inicio, en un parquecillo a la derecha y otra junto a la ermita de Santa Águeda también a la derecha (se aprecia a la izquierda de la foto 4).
Descripción: El puente antes comentado, que conduce al inicio de la ascensión, forma parte del Camino de Santiago por la costa, al igual que la ermita de Santa Águeda a la cual nos dirigimos. Puente construido a finales de S.XIV o principios del XV y que formaba parte también del Camino Real que unía Bilbao y Castilla a través del Valle de Mena. El sobrenombre de “las Brujas” o “del Diablo” se debe a leyendas populares sin fundamento alguno. Ya 50 m antes el inicio nos situamos por encima del 12% hasta llegar al cruce donde marcamos el comienzo del perfil. De inmediato cruzamos un paso a nivel al que sigue un corto “parche” de hormigón rayado, antes de continuar por asfalto en muy buen estado. Un buen firme que ayuda a sobrellevar las tremendas rampas a las que nos vamos a enfrentar. En apenas un cuarto de km llegamos a la primera herradura y la pendiente disminuye hasta un 6%. Más vale que nadie se confíe y aproveche este tramo para recuperar un poco el pulso algo alterado por la primera rampa que hemos dejado atrás. Apenas son cien metros hasta la segunda herradura, donde realmente comienza el “infierno”. Serán 700 metros a casi el 17% de pendiente media, que comienzan en la misma herradura superando el 20%. A mitad del tramo tenemos un respiro de otros cien metros al 11%, respiro que luego pagamos porque le sigue un tramo de trescientos metros por encima del 18%. Duro, realmente duro. Algunos hablan de pendientes que superan el 25%, algo que no existe salvo en el interior de alguna herradura. El máximo lo ciframos en un 22%, que ya está bien. Aunque al menos tenemos una ventaja: la carretera es tan sinuosa que apenas vemos veinte metros por delante de nosotros. Y casi de improviso, si levantamos un poco la vista, vemos los muros de la parte trasera de la ermita, con lo que sabemos que nuestro sufrimiento está a punto de terminar, al menos en un buen tramo. Descendemos casi medio kilómetro en dirección a Barakaldo y tomamos el primer desvío a la izquierda por una pista hormigonada, de nuevo en ascenso un tanto serio al principio pero que pronto suaviza hasta llegar a un establo grande inacabado. Ahí nos damos de lleno con la última rampa seria que comienza con un 18% de pendiente para ir disminuyendo poco a poco hasta el final a donde llegamos en 500 m, poco después de cruzar un paso canadiense. A partir de ese punto continua una buena pista (se aprecia en la foto 6) que desgraciadamente no es apta para ruedas estrechas, ya que sería un precioso recorrido por el cordal de Sasiburu hasta llegar al barrio de Saratxo y descender hacia Zaramillo ya por pista hormigonada. Quien haya ascendido con BTT o gravel, no debe perderse ese recorrido si no lo conoce.
Mapa situación:
©