Comentario: En mi opinión es una de las rutas más duras que se pueden hacer en la isla de Tenerife, al tratarse de nada menos que 13,5 km al 8,15%, superior en mi opinión, y por mucho, a Masca. Es una gran olvidada sobre todo porque cerca está la susodicha ascensión por El Palmar que quita todo el protagonismo, y por tratarse de un camino Real que se encuentra apartado de las rutas habituales de circulación. Para realizarla partimos de Sibora, en la costa de Los Silos, junto a un esqueleto de ballena muy espectacular. Los primeros dos kilómetros son llanos, para ir calentando algo, y curiosamente por una carretera que lleva el nombre de Camino del Canapé, lo que nos advierte de todo el ágape que viene detrás. Una vez que salimos de la localidad de Los Silos tomaremos el camino Real de Las Arenas, que a través de 15 herraduras en un par de kilómetros nos dejará en Lomo Morín. Estos casi 2,5 kilómetros son, sencillamente, terroríficos, con rampas sostenidas del 13 y 14% y un regalo del 25% al final de los mismos.Vaya en descarga que si tienes arrestos para fijarte en el paisaje, este es impresionante. Pasado Lomo Morín nos incorporamos al TF423 hacia el mirador de Tierra del Trigo. Se trata de una carretera amplia y muy bien asfaltada que nos lleva por una serie de "descansos" al 7 y 8%, con un llano de casi un kilómetro en el que incluso descendemos unos metros, lo cual se agradece. Se puede parar en el Mirador para contemplar la maravilla de la costa norte de Buenavista y Los Silos, así como Garachico, y de paso, descansar un poco para el tramo final. Casi en el Km 9 de ascenso nos incorporamos a la TF-82, que es la que hace la subida a Erjos, aunque apenas serán 1000 metros los que rodemos por la misma, muy bien asfaltada, con buen arcén y unas rampas del 6 y 7%. Pasado ese kilómetro hay un cruce a mano izquierda con un desnivel brutal, esa es nuestra sección final. Cambia el asfalto, desaparece la pintura y se estrecha mucho. Si hay suerte y el día es despejado, las vistas del Teide y Pico Viejo son bestiales. Aquí y durante 3 interminables kilómetros nos moveremos en el 13-14% con rampas del 20% en varios tramos y un pequeño descanso al 6% a mitad de camino. Al final de los mismos se llega a una gran rotonda que nos conduce a San José de los Llanos, destino final al que accederemos tras 500 metros finales muy llevaderos al 4,5%. Justo en la plaza del mismo hay un bar, Bar Los Llaneros. Allí podremos abastecernos de lo que necesitemos para recuperar el aliento. Lo dicho, en mi opinión un ruta durísima, de las más duras de la isla.
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