Altigrafía y comentarios enviados por:
Guillem de Vera

Localización: En la N-260 o “eje pirenaico” que atraviesa el Pirineo en dirección este-oeste por su vertiente española. Nos interesa el tramo que une la población de Broto en la comarca de Sobrarbe con la de Biescas en la comarca del Alto Gállego.

Especificaciones: Carretera sin arcenes de unos 5 a 6m de ancho, con asfalto en buen estado. Existen algunas grietas debido a los rigores invernales, pero no supondrán ningún problema. La señalización horizontal es orientativa. El tráfico puede ser intenso en verano hasta el cruce de Torla (los primeros 3km aproximadamente), ya que este da acceso al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. La intensidad de la circulación disminuye una vez superado este cruce.

Fuentes: No vamos a pasar sed, ya que el agua abunda en el Pirineo incluso en época estival. Hay una fuente-lavadero en la carretera al paso por la localidad de Linás de Broto. En el pueblo de Broto existen dos. Una en la Plaza Mayor junto al puente donde da inicio la altimetría, y otra junto al museo de la ganadería. En la Plaza Mayor de Viu hay otra fuente. La de Torla está un poco más escondida y queda más alejada de la carretera (a 1km aproximadamente). Sólo en Fragen no encontraremos fuente, o si la hay no está a la vista.

Comentario: Estamos en el Pirineo, pero no se trata en absoluto de un puerto exigente. Esto nos permitirá ascender relajadamente y disfrutar de los hermosos paisajes y pueblos que nos ofrece el Pirineo oscense. Esta vertiente del puerto es algo más fácil que la vertiente de Biescas, pero se parece bastante en cuanto a altimetría, dificultad y paisajes. Podríamos destacar en la vertiente que aquí proponemos la cercanía al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, paraje de singular belleza que alberga varios tresmiles pirenaicos dignos de admirar. Desgraciadamente, el acceso al parque esta prohibido a todo tipo de vehículos, incluidas nuestras humildes bicicletas. Sólo los caminantes y los autobuses habilitados a tal efecto tienen permitido el acceso al parque, negándonos así la posibilidad de disfrutar con nuestras máquinas de una bella ascensión de unos 4km al 6% en un marco de naturaleza exuberante y elevadas cumbres.

Volviendo a nuestra altimetría, las pendientes medias por kilómetro se sitúan en el 6% como mucho y la pendiente máxima no superará el 10%. Podríamos dividir la ascensión en tres partes. Una primera de unos 6km con una pendiente media en torno al 5 – 6%, donde encontraremos una zona inicial de herraduras. La segunda parte, de unos 4km, une las localidades de Viu y Linás de Broto y es más bien llana. Finalmente, los últimos 3km aproximadamente vuelven a ascender al 5 – 6% de pendiente media. Damos inicio a la altimetría en el pueblo de Broto, más concretamente en el puente sobre el río Ara. A mano derecha destacan las altas cumbres rocosas del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. A mano izquierda podemos ver, prácticamente dentro del pueblo, la cascada del río Sorrosal que se precipita por una gran pared vertical donde los más valientes se atreven a escalar la vía ferrata que asciende junto a la caída de agua. Al salir del pueblo vemos la sucesión de herraduras que nos situarán a una mayor altitud para poder acceder al valle del río Sorrosal abandonando el valle de Broto. El primero desemboca en el segundo procedente de la izquierda. Este cambio de valle se produce al superar el cruce de Torla, donde nuestra ruta cambia su rumbo norte por el este. Si queremos acercarnos al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido solo podremos hacerlo hasta la barrera. Lo haremos pasando por Torla (a algo más de 1km del cruce) y recorreremos unos 5km de escasa pendiente hasta llegar a la barrera que nos prohíbe el paso, precisamente donde empieza la ascensión (unos 4km al 6%) al valle glaciar de Ordesa.

Continuamos con la altimetría a partir del cruce de Torla, donde una larga recta nos adentra en el bosque de robles. Pasaremos Fragen, que queda a unos 400m de la carretera y al llegar a Viu, donde hay un camping, la pendiente cesa. Entramos en la segunda parte más bien llana. La llegada a Linás de Broto se hace cruzando, tras una corta bajada, el río Sorrosal. En este puente podemos ver a mano derecha el pico de la Tendeñera (2847m) y a mano izquierda el pueblo a los pies del Pelopín (2007m). Entramos en Linás de Broto por la Iglesia de San Miguel, que es del s. XVI pero su torre defensiva data del s. XIII. Al salir del pueblo encaramos la tercera y última parte que vemos trazada sobre la ladera de la montaña en forma de cicatriz ascendente. En el puerto encontraremos la típica señal marrón, un área de descanso con paneles informativos y un túnel negro como la boca del lobo. Si hemos sido observadores nos habremos dado cuenta de que no nos encontramos orográficamente en el paso entre montañas. La perforación en la roca nos ha ahorrado, no sabemos si para bien o para mal, unos 200m más de desnivel en el puerto. Si nos atrevemos a atravesar el estrecho, oscuro, recto y largo (680m) agujero abandonaremos la comarca de Sobrarbe para descender, ya en la comarca del Alto Gállego, la otra vertiente del puerto hacia Biescas.